Expresar tu enojo también es cuidarte

Expresar tu enojo y decir lo que te molesta también es cuidarte.

Puede ser súper difícil decir lo que sentimos o expresar nuestras ideas por temor a herir a otra persona se distancie o se arruine el momento, pero expresar nuestro enojo también puede ser una forma de mostrar que necesitas un cambio y que no nos sentimos bien con cómo están las cosas.

Aprender a hacerlo de una manera respetuosa y firme que te permita establecer límites puede ayudarte a avanzar en tus relaciones y mostrar cuando algo no es justo o sano. Comenzar a decir lo que no nos parece bien puede ser difícil porque pasar del extremo de callárnoslo al otro opuesto puede hacer que nos expresemos con mucha fuerza, incluso llorando o gritando y es ahí donde nos toca aprender a autorregular nuestra emoción.

Quizá el desafío sea identificar lo que sentimos, ponerle palabras y gestionar de un modo distinto nuestras emociones. Porque si andas con la “cara larga” no pasa nada, no tienes que cambiar tu expresión o tu sentir. No se trata de un carácter o de intensidad, sino más bien de un trabajo personal necesario que a veces puedes hacer por ti mismo o con ayuda terapéutica.

Está bien enojarse, es sano llorar, no hay emociones buenas ni malas y enojarte no te hace peor persona. Dale cabida a tu enojo, ponle atención y te servirá como una herramienta para conocerte a ti mismo y hacer caso a las señales de incomodidad o malestar en ti.

Psicóloga Karen Klein